Diseños con el corazón: "Orgulloso de mi cultura"
Conocemos a Madjou Drame desde hace tres años, él es un tejedor de la ciudad de Mopti (situada en la confluencia de los ríos Niger y Bani, entre Tombuctú y Segú), pero desde hace muchos años vive y trabaja en Bamako.
Mi hermana Laura y yo estábamos comprando tejidos para la Galería de MAMAH AFRICA, y le pedí que posara frente a este tapiz emblemático de algodón y lana. Se trata de una variante del famoso diseño General Soumare, uno de los que se crearon en los años 60 para celebrar la independencia de Malí, dando protagonismo a los colores verde, oro y rojo de la bandera del país.
El tapiz peul cuelga de una tapia sujeto con piedras, y es allí donde Madjou muestra su trabajo. A unos pocos metros tiene su telar, en la calle, donde puedes admirar el trajín del movimiento de sus pies y manos pasando los hilos de colores.
Estas mantas forman parte de la tradición textil peul, pueblo nómada dedicado al comercio y al pastoreo, y se ofrecen como regalos de boda y tapices de decoración. El tapiz que el artesano tiene detrás suyo es una versión moderna de los ancestrales tapices clásicos Arkilla Kera.
El tejedor tiene un papel primordial en la sociedad y en la economía local. Es admirable el reto que tienen de mantener y difundir su cultura a través del textil, frente a la industrialización y la avalancha de tejidos sintéticos que vienen desde Asia.
Enseguida percibí en su rostro el enorme orgullo de su trabajo, reflejado en su mirada y en su pose.
En mi última colección de moda, tienen protagonismo las blazer confeccionadas con estas mantas. También los bogolanes, los índigos de Guinea Bissau y el kente de Ghana, siendo los tejidos hilados a mano más artesanales y tradicionales de esta colección.
Toda una representación cultural de estos países por medio del arte textil y un acercamiento de África a España a través de la moda, dando así valor y belleza a la colección Casablanca- Bamako. 2019/2020.